Son datos de un informe del Observatorio del derecho Social, que además alertó que el valor que se paga perdió ante la inflación.

En medio de los reclamos de distintos gremios para que se universalice el pago de las asignaciones familiares, un informe confirmó que el ANSES paga cada año menos beneficios, y que el valor nominal de esta ayuda pierde ante la inflación. El régimen nacional tiene un tope que se actualiza una vez por año, y que desde el 2017 deja a más trabajadores afuera, al punto que la cantidad de asignaciones liquidadas desde ese año se redujo un 15,4 por ciento.

Los cálculos del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma apuntan a cómo el sistema que actualiza el límite que excluye a los asalariados que reciben el beneficio está expulsando a muchos. Además, la actualización que se hace de los valores pierde comparado con la inflación, lo que deprecia su valor nominal. Estas discrecionalidades crecen cuando se mira lo que sucede en las provincias y los municipios, por lo que se viene reclamando unificar el sistema.

Las asignaciones familiares son un complemento salarial que se paga por hijo de trabajador, que cobran por debajo de un límite. Actualmente, ese tope está ubicado en un monto de 316 mil pesos en bruto como ingreso familiar, sin embargo a esta restricción se le suma que si al menos uno de los integrantes de la familia cuenta con un salario superior a 158 mil pesos en bruto, todo el grupo queda excluido del sistema de asignaciones familiares.

En marzo estos valores se actualizan, para poner un nuevo límite. «Como resultado de este mecanismo y de la actualización salarial, la cantidad de beneficios que liquida el ANSES es cada vez menos», afirmó un trabajo del Observatorio del Derecho Social, entidad de la CTA Autónoma. El reporte, al que tuvo acceso Gestión Sindical, recalcó que a febrero del 2022 “se liquidaron 2.246.412, contra 3.242.746 de marzo del 2021”.

Esto quiere decir que casi un millón de asignaciones se dejaron de pagar. Esta tendencia se experimenta desde el 2017. Desde ese año, según el reporte del observatorio, la ANSES «dejó de liquidar 627.632 asignaciones mensuales», lo que representa una caía del 15,4 por ciento desde hace cinco años. Estos datos muestran cómo fue quedando gente afuera del pago, un reclamo de muchos gremios.

A fin de año, dirigentes del Frente Sindical anunciaron que este tope se iba a subir. Incluso las versiones dieron los números acordados luego de una cumbre con la ministra de Trabajo, Raquel «Kelly» Olmos: 280 mil pesos para noviembre del 20222 y 330 mil pesos para enero de este año. Pero pese al supuesto compromiso, hasta el momento no se logró dar ese paso.

Menos valor nominal
Al tiempo que cae la cantidad de hijos de trabajadores que quedan excluidos de esta ayuda estatal, el valor nominal sigue cayendo respecto de la inflación. En este sentido, el Observatorio del Derecho Social recordó que la actualización del valor se realiza con el mismo mecanismo que las jubilaciones. «Desde fines del 2015 acumulan un retroceso del 27,5 por ciento de su valor real», confirmó la entidad sindical.

En diciembre de este año, luego de reunirse con el ministro de Economía Sergio Massa, el dirigente camionero Pablo Moyano adelantó que antes de fin de año «habrá novedades» respecto a las asignaciones familiares y el Impuesto a las ganancias.

Mientras en la segunda opción hubo avances en el tope y se extinguió el aguinaldo, algo que era pedido por los gremios. Pero respecto a las asignaciones, se volvió a fallar, lo que generó malestar en el propio dirigente, en declaraciones recientes.

Diferencias por jurisdicción
Si el sistema nacional genera molestas y quejas entre los gremios, lo que pasa cuando se baja de jurisdicciones profundiza las inequidades se profundizan, lo mismo que el enojo que genera entre la dirigencia sindical.

Es que cada provincia tiene su sistema, con cálculos diferenciados. Así, como marca la entidad de la CTA Autónoma, «en Buenos Aires y la Ciudad de Buenos Aires el monto de las asignaciones familiares equivale al 50 por ciento del sistema nacional, y en Santa Fe no llega al 10 por ciento».

Esto es mucho más discrecional si se baja a los distritos. Si bien no hay cálculos, recientemente la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (FESIMUBO) denunció que los valores de las asignaciones familiares se pagan «a capricho» de los intendentes.

La entidad que lidera Rubén “cholo” García pide que se modifique en la legislatura provincial los cambios de desacoplaron las asignaciones del sistema provincial, dejando ese pago a criterio de los gobiernos locales.

«Dicha modificación cercena el derecho de los trabajadores y las trabajadoras municipales de la Provincia a cobrar las asignaciones familiares de conformidad con la legislación nacional en materia laboral para dejarla librada a la voluntad o capricho de cada intendente», explicaron desde la entidad mediante un solicitada publicada a fin de año, cuando marcharon para pedirle a los legisladores respuestas.

 

Fuente:https://gestionsindical.com/cinco-anos-cayo-15-cantidad-trabajadores-que-cobran-asignaciones-familiares/?fbclid=IwAR0fT8eDkB_CJkiDCnP7QoWGUlnXzlhEdrbBlycQByt3z7DJFaRKsTxpOJI